Toscana está dividida en diez provincias: Arezzo, Firenze, Pisa, Siena, Lucca, Pistoia, Grosseto, Massa Carrara, Livorno y Prato.

La Toscana fue fundada por los etruscos en el siglo XI a.C. y se llamó originariamente Etruria. La mayor parte de lo que conocemos de los etruscos fue conocido a partir de datos arqueológicos recogidos en la Toscana.

Por sus paisajes y su legado artístico, Toscana es considerada "la región más bonita de Italia". La compleja cultura de los etruscos, su interés por el arte y su estilo griego de democracia llevaron a una derrota pacífica. En el tercer siglo a.C. la región estuvo bajo el poder del Imperio Romano y fue llamada Tuscia. Después de la caída del imperio, la región fue invadida por los godos, los lombardos, los bizantinos y los francos. En 1860, la Toscana pasó a formar parte de Italia.

La Toscana es una tierra encantada, creada a partes iguales por el esfuerzo del hombre y por la acción de la naturaleza. En esta región se puede encontrar desde la aldea más diminuta hasta la magnífica Florencia. Cada pulgada de tierra ha sido esculpida, primero por los elementos y luego por generaciones de habitantes cuyo objetivo ha sido siempre doble: hacer que la tierra produzca lo máximo posible y hacer que la tierra sea lo más bella posible.